CAPITULO 1.5 – INVERSI覰
1.5 Inversi贸n
1.5.1 Inversi贸n Bruta Interna
Seg煤n el INDEC, en los nueve primeros meses del a帽o 2013 la Inversi贸n Bruta Interna Fija (IBIF) creci贸 un 7,9% medida en precios constantes. Entre los componentes de la misma, Equipo Durable de Producci贸n (EDP) registr贸 un incremento del 12,9% entre enero y septiembre, en tanto que Construcci贸n se expandi贸 3,2%. De esta forma, la participaci贸n de la Construcci贸n sobre el total de la IBIF se ubica en torno al 48,9%, mientras que el 51,1% restante corresponde al EDP.
Por su parte, la medici贸n alternativa elaborada por la consultora de Orlando J. Ferreres, dio cuenta de un crecimiento del 4,0% de la inversi贸n bruta interna mensual (IBIM) para el a帽o 2013. En sinton铆a con la medici贸n oficial, el crecimiento del rubro EDP fue superior al de la construcci贸n (6,3% vs. 2,9%). A diferencia del c谩lculo oficial en el cual la IBIF represent贸 un 23,1% del PBI, la IBIM se constituy贸 en un 20,7% del producto. A continuaci贸n en el Gr谩fico 1.42 se muestra la evoluci贸n mensual de la IBIM comparada con su desempe帽o doce meses antes.
A pesar de que en los meses de enero y febrero se produjeron ca铆das interanuales del 4,6% y 0,6% respectivamente, la IBIM inici贸 el 2013 en una fase de recuperaci贸n tras la ca铆da evidenciada en la mayor parte del 2012. No obstante, el mejor desempe帽o se materializ贸 durante el segundo trimestre del a帽o, con crecimientos interanuales de 8,6%, 11,6% y 5,7% en abril, mayo y junio respectivamente. Vale decir que, la comparaci贸n con el segundo trimestre del a帽o 2012 es levemente enga帽osa pues presenta una base de comparaci贸n sumamente baja. En todos los meses que componen el segundo semestre del a帽o, la IBIM creci贸 un 3,8% promedio interanual, dando cuenta de la desaceleraci贸n que afectaba al conjunto de la econom铆a una vez agotado el efecto derrame del sector agropecuario.
Sin embargo, y a pesar de que en 2013 la inversi贸n bruta interna tuvo un ligero crecimiento, vale resaltar un hecho puntual que complica el panorama de cara al futuro inmediato. En lo que respecta a la importaci贸n de bienes necesarios para incrementar la capacidad productiva, en 2013 se observ贸 una mayor relaci贸n de compra de piezas y accesorios para bienes de capital que de las propias m谩quinas. Ello ser铆a un indicio de que la tasa de reposici贸n de los activos f铆sicos en el pa铆s cay贸 el pasado a帽o, y se increment贸 la puesta a punto de equipos de mayor antig眉edad.
En el Gr谩fico 1.43 se muestra, en color m谩s claro el ratio de importaci贸n de bienes de capital sobre piezas y accesorios y la l铆nea m谩s oscura representa la proporci贸n de divisas afectadas a la compra de bienes de capital en relaci贸n a los bienes intermedios. Los promedios hist贸ricos de los 煤ltimos veinticuatro a帽os en ambos ratios se ubican en 121% y 64% respectivamente.
Por su parte, en el promedio de los meses que comprenden el a帽o 2013 dicha relaci贸n se ubic贸 en 84% para el ratio BK/PyA, y en 65% para BK/BI. Es decir, el an谩lisis de los gastos en materia de importaci贸n para 2013, da cuenta de una menor incorporaci贸n relativa de nuevos equipos productivos.
Lo m谩s grave es que la tendencia viene desarroll谩ndose hace ya m谩s de cinco a帽os, incrementando la vida 煤til de los equipos f铆sicos en el pa铆s. La mayor depreciaci贸n de los mismos y la baja renovaci贸n impactan negativamente en la productividad, dado que no se produce una actualizaci贸n tecnol贸gica al tiempo de que resulta m谩s costoso poner operativa una m谩quina de cinco o diez a帽os de antig眉edad que un equipo nuevo. Sin dudas el contexto de las cuentas externas argentinas y las proyecciones de crecimiento econ贸mico no representan buenos alicientes en este sentido. De all铆 que, el foco en las pol铆ticas p煤blicas en materia de inversiones deber铆a estar puesto en la evaluaci贸n de los equipos actuales y si la situaci贸n lo ameritase, en un programa de renovaci贸n de capital productivo en sectores estrat茅gicos de la econom铆a.
1.5.2 Inversi贸n Extranjera Directa
Al ligero estancamiento que exhibe la inversi贸n interna en Argentina en los 煤ltimos dos a帽os, se le suma un complicado panorama de cara a los desembolsos provenientes desde el exterior a tales fines. En los nueve primeros meses del a帽o 2013 el BCRA inform贸 una ca铆da interanual del 27,4% en los flujos de inversi贸n extranjera directa proveniente desde el exterior. Vale remarcar que se trata de la segunda ca铆da importante en los 煤ltimos cinco a帽os, puesto que en 2009 la IED receptiva se retrajo un 56,7%. Entre los meses de enero y septiembre de 2013, llegaron a nuestro pa铆s en concepto de IED capitales por un total de aproximadamente 2.000 millones de d贸lares. Dicho monto se encuentra notablemente por debajo de los 2.700 millones afectados bajo este concepto en los a帽os 2008 y 2012.
El Gr谩fico 1.44 muestra los desembolsos mensuales en materia de inversiones directas realizados por no residentes. Como puede observarse, los seis primeros meses del 2013 muestran importantes contracciones respecto a igual per铆odo de 2012. En particular, entre marzo y junio las variaciones interanuales de la serie muestran ca铆das de entre el 42% y el 58%.
Es importante resaltar que los flujos de inversi贸n extranjera directa no responden a la tasa de inter茅s que ofrece el pa铆s por invertir en 茅l, sino m谩s bien a cuestiones vinculadas a oportunidades de desarrollo productivo, con tasas de retorno esperadas en funci贸n del desenvolvimiento de la actividad econ贸mica. En ese sentido, las oportunidades que presentaba la econom铆a argentina entre 2010 y 2012 no han cambiado significativamente en 2013. M谩s bien, son las condiciones macroecon贸micas las que mutaron, generando mayor incertidumbre y posponiendo los desembolsos de capitales. Las tensiones en el mercado de cambios y el alto grado de informalidad que presenta la econom铆a, junto con una presi贸n tributaria en aumento desalentaron la aplicaci贸n de nuevos fondos provenientes del exterior.
Otro aspecto que suscita cierta preocupaci贸n en este sentido, es que la mayor cantidad de desembolsos en concepto de IED se concentran en pocos sectores. Adem谩s, se trata de actividades econ贸micas basadas en la extracci贸n o la explotaci贸n de los recursos naturales de los que dispone el pa铆s. Esto no representa una mala noticia en s铆 mismo, pero bajo las actuales condiciones de regulaci贸n y la escasa funci贸n de control que ejerce el Estado en la materia, puede transformarse en un riesgo potencial. M谩s a煤n, si las condiciones de explotaci贸n no son favorables para el pa铆s, el riesgo de agotamiento o disminuci贸n en el stock de recursos naturales no renovables se incrementa.
El Gr谩fico 1.45 subsiguiente muestra la aplicaci贸n de fondos provenientes del exterior con fines de inversi贸n en los nueve primeros meses del a帽o 2013, seg煤n el sector de actividad. Se destaca sin dudas el sector minero como el mayor receptor de fondos, con el 50,7% del total proveniente en los tres primeros trimestres de 2013, seguido por el petrolero con un 21,9% adicional.
El bajo inter茅s que despierta la mayor parte de los sectores industriales es motivo de preocupaci贸n, puesto que es un sector que est谩 afectado por altos niveles de competencia, tanto a nivel latinoamericano como mundial. Adem谩s, no se observan importantes avances en el marco de la complementaci贸n productiva con firmas de otras latitudes, dificultando el ingreso a nuevos mercados. Por su parte, el sector primario no minero contin煤a siendo objeto de inter茅s para los residentes dom茅sticos, puesto que los inversores internacionales han privilegiado otros destinos en lo que a la explotaci贸n de la agricultura y la ganader铆a refiere, por caso Paraguay, Uruguay y Brasil han recibido mucha m谩s atenci贸n que la Argentina, a煤n cuando las tierras de las que disponen presentan una menor calidad de las que posee nuestro pa铆s.