Redactor/a: Jerónimo Franco Trigo

Sala: Sala de Derecho Penal

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Justicia de la pospandemia

Expediente y firma digital son tan solo palabras que pasaron de moda. Esos primeros pasos en los albores de la digitalización de la justicia, demostraron ser un minúsculo eslabón de una larga cadena que hizo su aparición de manera explosiva en estas últimas semanas. 


Y es que, de un dÁ­a para el otro, asÁ­ repentinamente, nos vimos obligados a instalar una cultura de trabajo de la que muchos tradicionalistas todavÁ­a renegaban, pero que, a fuerza de la emergencia, también se vieron involucrados en la digitalización judicial. 


La pandemia nos ha puesto en evidencia cuán innecesario es el papel a la hora de “presentar escritos” y de “dictar resoluciones”, sin dejar de mencionar a los dictámenes, oficios, pedidos de informes, y muchos más. 


Con un baldazo de agua frÁ­a, al estilo ice bucket challenge, nos dimos cuenta de que las declaraciones de personas imputadas, testigos, juicios abreviados y hasta juicios comunes, entre otros, podÁ­an ser tramitados con total normalidad a través de video conferencia. Imagino una audiencia de selección de jurados populares con la presencia virtual de las partes esenciales. Los próximos, serán procesos con un diálogo más activo, con una oralidad plena. 


El home office, el teletrabajo, nos brindaron la oportunidad –forzosa e indispensable– de comenzar a utilizar todas las herramientas virtuales que tenemos diariamente a disposición, para destacar que las labores judiciales sÁ­ pueden ser realizadas a distancia. AsÁ­ como las empresas y los estudios jurÁ­dicos se ha digitalizado, también lo ha hecho el servicio de justicia.


El tiempo de la pospandemia nos presentará nuevos desafÁ­os, muchos de los cuales hoy no se pueden imaginar, pero sÁ­ reconocer que algunos de ellos estarán fuertemente vinculados a la importante y difÁ­cil situación de recolectar y presentar pruebas (pienso en la incorporación al proceso penal). Ni hablar de la construcción de una estructura técnica sólida y sostenible en el tiempo, servidores, seguridad informática, y porqué no también, de blockchain como certificado de legalidad. 


La circunstancia mencionada, hará posible una cooperación global entre todos los organismos que se encuentran vinculados con el servicio de justicia, lo que fortalecerá una respuesta más rápida y eficiente, para reducir tiempos y eliminar costos. 





* Abogado, miembro de la Sala Penal del Instituto de Investigaciones JurÁ­dicas Empresariales de la Bolsa de Comercio de Córdoba.