Mercado laboral muy debilitado ante la pandemia - Resumen Semanal

A pesar del rebote de actividad siguió cayendo el empleo formal

Los datos del mercado laboral del tercer trimestre, recién publicados por INDEC, muestran un fuerte aumento del empleo en relación a los peores meses de la pandemia, pero que aún se encuentra muy por debajo de los niveles del mismo trimestre del año pasado. La tasa de desempleo abierto bajó a 11,7% a nivel nacional, luego de alcanzar el 13,7% de la población económicamente activa en el segundo trimestre y 9,7% en el tercer trimestre del año pasado. Esta dinámica está en línea con el aumento del Producto Bruto Interno de 12,8% en el tercer trimestre respecto al anterior, pero que aún está 10,2% por debajo del nivel del mismo período de 2019.

Por su parte se aprecia que una gran cantidad de trabajadores que dejaron el mercado trabajo en el segundo trimestre aún se encuentran inactivos. La tasa de actividad, que mide el porcentaje de la población que está ocupada o que busca trabajo, es de 42,3%, mayor al 38,4% del segundo trimestre, pero muy inferior al 47,2% alcanzado en el tercer trimestre de 2019.

Esto refleja la situación de trabajadores afectados por la pandemia, que deciden no buscar trabajo ante las restricciones y las escasas oportunidades de empleo. Considerando a ese grupo de trabajadores excluidos del mercado laboral, la tasa de desempleo ascendería al 20,8%, la que, si bien es menor al 30% del segundo trimestre, da muestras de las graves secuelas de la pandemia en el mundo del trabajo.

Es también preocupante que continuó la destrucción de empleo urbano de alta productividad en el tercer trimestre, donde se habrían perdido 212 mil empleos privados formales en tanto que se crearon 52 mil empleos públicos. En efecto, la mayor parte de la creación de empleo reciente fue en trabajos por cuenta propia e informales de baja productividad.

En definitiva, los datos del mercado laboral confirman que la recuperación económica actual es un rebote más que un impulso hacia un crecimiento sostenido. Si bien se espera que la actividad continúe su recuperación en los últimos meses del año es probable que esa mejora pierda dinamismo, ante el impacto negativo que tiene sobre el poder de compra la aceleración de la inflación del último trimestre por encima de los salarios. En suma, 2020 cerraría con una contracción de actividad de más de 10%, posicionando a la economía argentina entre las más afectadas en el mundo por la pandemia.

Se mantienen elevadas las presiones inflacionarias

La inflación de noviembre presentó una suba interanual de 35,8% y de 3,2% respecto a octubre de acuerdo al INDEC. A pesar que el aumento general de los precios fue levemente menor al esperado, este se mantiene en un nivel elevado y con una inflación núcleo de 3,9% mensual, contrarrestada solamente por el menor crecimiento de los precios de bienes y servicios estacionales y regulados.

Los datos confirman la dinámica alcista de los precios, que podrá profundizarse en los próximos meses ante los ajustes de precios regulados como los de combustibles y los esperados en 2021 para las tarifas de servicios públicos. Teniendo esto en consideración y la persistencia del financiamiento monetario del déficit fiscal, resulta lógico que las expectativas inflacionarias hayan continuado en aumento de cara a los próximos meses.