Informes
Económicos



Fecha: 3/2021

Aún es frágil la recuperación económica - Resumen Semanal

El agro y la construcción impulsan el rebote de la economía

En el primer mes del año, la producción manufacturera y la construcción mostraron mejoras en su actividad, tanto en términos mensuales como interanuales. En el caso de la industria manufacturera, se observó un crecimiento de 4,4% respecto al mismo mes de 2020 y de 1,7% al comparar el índice con diciembre de 2020. Las categorías que tuvieron un mejor desempeño fueron las de minerales, metales, maquinarias, equipos y vehículos de transporte, principalmente por ser proveedores de insumos del sector agrícola y, de forma más preponderante, la construcción.

El Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción mostró un incremento de 23,3% en relación al año anterior y 4,4% en relación a diciembre de 2020, persistiendo el importante rebote observado durante los últimos meses. Sin embargo, y al igual que en 2020, esto se explica prácticamente de forma completa por el aumento en el consumo de insumos, ya que los puestos de trabajo registrados continúan muy deprimidos; en diciembre el empleo en el sector estaba 13,3% por debajo del nivel de diciembre del año anterior, acumulando una caída para todo 2020 de 22,4%. De esta forma, el derrame del buen desempeño del sector sobre el resto de la economía aún se encuentra limitado.

La frágil recuperación económica no se traslada al consumo

Durante enero, no solo que el consumo no tuvo una recuperación, sino que habría exhibido una baja de 5,8% anual, acumulando más de dos años de caída. El marcado descenso del ingreso de las familias debido a la creciente inflación y las recomposiciones salariales insuficientes, sumado a la importante pérdida de puestos de trabajo por la profunda crisis atravesada en 2020, no permiten que el consumo se acople al tenue rebote del resto de la economía.

A pesar de que todos los rubros del consumo exhibieron un declive, los más afectados abarcan el consumo no esencial, una tendencia que se observó en nuestro país y el resto del mundo tras el impacto del COVID-19, pero que aún persiste con gran magnitud en Argentina.

Para el caso de Córdoba, los datos son aún menos alentadores, ya que a febrero se observó una variación negativa de 8,9% en el consumo respecto al mismo mes de 2020 según los datos de la Federación Comercial de Córdoba. Contrastando con el caso de Argentina, en Córdoba solo un rubro incrementó sus ventas interanualmente, y esel de ferretería y materiales para la construcción, muy ligado al repunte de la actividad de la construcción que se mencionó previamente.