CULTURA

 CAPÍTULO 16: CULTURA

 

“La  cultura  debe  ser  considerada  en  grande,  no como un simple medio para alcanzar ciertos fines, sino como su misma base social. No podemos entender la llamada dimensión cultural del desarrollo sin tomar nota de cada uno de estos papeles de la cultura.” Amartya  Sen,  profesor  de  la  Universidad  de  Lamont y Harvard, Premio Nobel de Economía 1998. Mientras  que  las  ventajas  cambiarias  pierden  fuerza  en  el  tiempo  y  demuestran  no  ser  una  gran variable de diferenciación, el mundo está comenzando a valorar todas las actividades intensivas en conocimiento, diseño y contenido artístico. En este contexto, el sector de Economía Cultural, que utiliza la creatividad como combustible, tiene un impacto concreto y cada vez más notorio sobre el desarrollo de la economía y la sociedad. 

 

16.1 Introducción 

Los profundos cambios y transformaciones a nivel mundial tras la última crisis económica, obligan a buscar en los mercados nuevas opciones como fuente de desarrollo. De este modo aparecen conocimiento, creatividad, diseño y talento como una alternativa eficaz, siendo estas precisamente las características de las Industrias Culturales (IC). 

Históricamente se atribuía importancia al arte y la cultura sólo en términos sociales, es decir como patrones distintivos de una cultura que conformaban la identidad social de un grupo; pero a partir de la década de 1990 con exitosas experiencias a lo largo del mundo, tales como el caso de Inglaterra o Brasil, se demostró la importancia de dichas industrias en términos productivos y económicos. Así se incorpora una concepción mercantilista al tradicional valor social.  El capítulo invita a recorrer un extenso análisis acerca de las legislaciones, presupuestos y medidas implementadas tanto a nivel internacional, nacional y provincial, para finalizar con el estudio particular del caso de la Provincia de Córdoba y su ciudad capital. 

En una última instancia, el lector, podrá conocer políticas de tipo cultural que se consideran fundamentales para el desarrollo de las IC en términos simbólicos y mercantiles. 

 

16.2 Marco Teórico 

El término IC conceptualiza un complejo formado por diversos componentes, debiendo comprenderse primero de manera individual para luego entender sus implicancias. De este modo a continuación se realizan definiciones básicas para la investigación. 

 

16.2.1 Industrias Culturales  

Por IC se entiende a la producción, distribución y reproducción de bienes y servicios culturales bajo modelos comerciales e industriales. Además es el “conjunto de ramas, segmentos y actividades auxiliares industriales, productoras y distribuidoras de mercancías con contenidos simbólicos, concebidas por un trabajo creativo, organizadas por un capital que se valoriza y destinadas finalmente a los  mercados de consumo, con una función de reproducción ideológica y social”353. Es menester destacar  que  si  bien  su  forma  de  consumo  y  almacenamiento  responden    a  patrones  comerciales  y económicos, no pierden el carácter simbólico y creativo bajo el cual fueron pensados y concebidos.  Pero para poder comprender de manera amplia el concepto de Industrias Culturales (IC) y la importancia de su desarrollo actual es menester desagregarlo en componentes como cultura, arte, creatividad, producto cultural, entre otros. 

El primero de sus  componentes es cultura, que según E.B. Tylor, hace referencia a “ese complejo total  que  incluye  conocimiento,  creencia,  arte,  moral,  ley,  costumbre  y  otras  aptitudes  y  hábitos adquiridos por el hombre como miembro de la sociedad”354.  De esta manera se entiende como el resultado de las manifestaciones humanas propias de cada hombre, presente en todas las sociedades y constituye el hábitat humano y los patrones sociales distintivos de un grupo humano.  

Como menciona Geertz355 también “denota un esquema históricamente transmitido de significaciones  representadas  en  símbolos,  un  sistema  de  concepciones  heredadas  y  expresadas  en  formas simbólicas por medio de los cuales los hombres comunican, perpetúan y desarrollan su conocimiento y actitudes frente a la vida”. Estos esquemas transmitidos históricamente son claves al momento de establecer lazos comunicativos, definidos por una noción simbólica compartida.  

Según la UNESCO creatividad, es un elemento esencial no sólo de la vida espiritual, sino también de la vida material y económica de individuos y pueblos. Es un término amplio en referencia a la capacidad humana de crear algo diferente e innovador. En el mismo sentido, hace referencia a la posibilidad de incorporar un aspecto diferente e incluir una funcionalidad distinta a un objeto. 

En la actualidad, arte es un concepto imposible de definir unívocamente. El quiebre conceptual de mayor magnitud es a partir de la década de 1960 en un contexto marcado por las Guerras Mundiales y como consecuencia de un proceso iniciado en el siglo XX. El arte contemporáneo pasó a ser el centro,  concibiéndose  así  como  cualquier  manifestación  realizada  por  una  persona  y  recibida  por  la sociedad, provocando impactos de mayor o menor significancia según sea el caso. Esto imposibilita plantear parámetros sobre qué es y qué no es arte, ocasionando dificultades al momento de definirlo. Es así que dicho concepto debe ser entendido de manera amplia.  

Los conceptos planteados hasta el momento son la base para comprender las nociones determinantes de las IC. En primer momento es necesaria la distinción entre producto creativo y producto cultural. El primero de ellos, según lo expuesto por Ojeda, J.356, es todo bien o servicio, idea o conjunto de ellas, conocimientos, hallazgos, soluciones o estrategias para alcanzarlas, etc., así como sus mutaciones. Posee la característica de ser original, diferente a todo lo demás y logrado por primera vez.  

Mientras que para poder comprender el término producto cultural se parte de una investigación ya realizada en la Ciudad de Córdoba357, en la cual es definido como el bien o servicio que posee un valor de uso ligado a la personalidad de los creadores; desde un punto de vista económico, este tipo de mercancía se caracteriza por el carácter aleatorio de su valoración. Un aspecto clave para destacar es el valor de uso y de cambio implícito en ambos conceptos. No obstante la diferencia fundamental es que los productos creativos abarcan algo nuevo, diferente a lo ya existente en el mercado y que intenta ser incorporado a él.  


353 Lurdes R. Espinosa Fernández, “Industrias culturales, concepto que evoluciona”, UNESCO, (s/f). 

354 E.B. TYLOR, “Cultura Primitiva”, 1871.

355 CLIFFORD GEERTZ, “La Interpretación de las Culturas”, Academic Press, New York, 1973.

356 OJEDA J., “Creatividad. Enfoques, evaluaciones, estrategias”; Editorial Inspiración; Santiago de Cuba, 2001.

357 ORTIZ, MILAGROS; “Es por Amor: las condiciones de creación, empleo y producción cultural en una ciudad ex‐céntrica”; 1ª

edición; Ábaco ‐ Cultura Contemporánea, Argentina 2009.


 

Definido cada uno de sus componentes se puede entender de manera unívoca el significado de IC, el cual no sólo acarrea un interés social en su producción y reproducción, sino que busca rédito económico en el consumo del bien o servicio cultural. 

De esta manera surge el concepto de economía de la cultura. Según un estudio realizado en Chile358 el término se interesa por la «aplicación de la teoría y análisis económico sobre los problemas del arte y las prácticas culturales (…) pone en funcionamiento las herramientas propias de la economía sobre las actividades artísticas y culturales en cuanto reconoce que éstas son objeto de producción, intercambio, consumo y bienestar». Es así como mediante la aplicación de herramientas económicas al arte y la cultura se logra un reconocimiento de las mismas como mercancías, aceptando la influen-cia de la cultura en la economía, sin olvidar el carácter simbólico implícito detrás de cada obra.

Todos estos conceptos se entienden en el marco de la globalización, el consumo masivo, la interco-nexión y sobre todo el comienzo de una nueva era posindustrial en donde el conocimiento, la infor-mación y la creatividad adquieren un rol fundamental en el desarrollo económico y social. De este modo, las IC adquieren fuerte protagonismo como fuentes de desarrollo económico.

 

16.2.2 Cadena de Valor 

Las IC engloban una multiplicidad de actividades, procesos y actores. En el Esquema 16.1 se muestra una generalización de la estructura de la cadena de valor.

La creación hace referencia al trabajo intelectual y de diseño que se realiza inicialmente para luego desarrollar el proceso productivo del bien o servicio cultural. Generalmente, este eslabón comienza con una mera idea de proyecto que tiene lugar en la conciencia del artista para luego ser plasmada en la concreción a través de un medio físico. La producción es la realización concreta de aquellos bienes o servicios que se han creado, pero que todavía constituyen una idea. A partir de esta etapa, se puede observar concretamente el producto cultural.


358 Consejo Nacional De Cultura y las Artes De Chile, Universidad Arcis, «Impacto de la Cultura en la Economía Chilena», Edi-ción del Convenio Andrés Bello, Colombia, 2003.


La distribución constituye la etapa en que los productos se ponen a disposición de aquellos actores que luego realizarán las ventas. La  exhibición  representa  el  momento  en  que  los  productos  culturales  son  difundidos,  puestos  a disposición de los consumidores para ser observados; en el mismo sentido, también constituye un espacio de formación cultural, de legitimación de los productos y de crítica mediática. La comercialización es la instancia en la cual se realizan las acciones tendientes a cumplir con los fines de lucro, fines indispensables para el desarrollo y la mantención de las personas que viven de la actividad. 

Finalmente, el consumo es cuando el público, ya sea a través de la compra o por medio de la observación  logra  adquirir  los  productos  culturales,  pudiendo  satisfacer  su  necesidad  de  demanda  de bienes y/o servicios culturales. 

Dentro de este esquema, se podría identificar a una gran cantidad de actores, entre ellos personas, empresas e instituciones, tanto del sector privado, como del público y el mixto. Asimismo, existen actividades  insertas  en  determinados  eslabones  que  no  tienen  fin  de  lucro,  pero  indirectamente generan valor agregado sobre los productos bajo análisis. 

Cada uno de los eslabones es igualmente importante para lograr una correcta inserción de la IC; sin embargo, dependiendo del subsector que se analice, puede ser necesaria la realización de actividades adicionales o, contrariamente, eliminarse algunas otras. 

La cadena de valor, representa el circuito que posibilita la producción de ideas de productos culturales, poniéndolas en práctica y poniendo sus resultados a disposición de las personas que requieren los productos o servicios culturales, para satisfacer sus necesidades. 

Como se mencionó, la cadena de valor de la IC descripta es una generalización de la misma. Esto es así, ya que si se divide la industria en distintas ramas, se puede pensar cada una de estas como una cadena independiente, que comienza con la actividad del creador individual o grupal y finaliza con el público consumidor359. 

 

16.2.3 Arte como Mercancía  

Tradicionalmente, las obras de arte han sido consideradas por su valor estético y social, en relación al diseño, el conocimiento y la sensibilidad del creador. 

No obstante, el arte ha profundizado su alcance económico a partir de la generalización del concepto de mercancía artística o arte como mercancía. Actualmente, las obras artísticas son consideradas por  los  coleccionistas  no  sólo  por  su  valor  intrínseco  artístico,  sino  también  como  una  inversión; pasando al plano comercial. 

En la economía actual, dependiendo del caso, el valor económico de las obras motiva su producción; ya sea desde su concepción o en su posterior comercialización. Es así que cobran relevancia variables como la singularidad del arte, la imposibilidad de reproducción de las obras, la antigüedad y la autenticidad, entre otros.  

Tal es así, que los artistas que se encuentran en el círculo comercial ven impuesta una tendencia propia de los mercados actuales; atendiendo a las ideas de estética que más y mejor se venden. El arte se convierte en una mercancía y objeto de destino para las inversiones; mientras el artista se 


359 Carlos M. M. Elía, Héctor Shargorodsky, “Economía de la Cultura”, Buenos Aires, Argentina, 2007.


  

convierte  en  un  ser  individualista  que  busca  ser  aceptado  por  las  grandes  galerías  y  trascender  a nivel internacional, en función de sus logros económicos. 

Como  se  mencionaba  anteriormente,  las  obras  de  arte  comienzan  a  verse  como  destino  para  los fondos  excedentes  del  sistema  económico.  De  esta  manera,  han  comenzado  a  realizarse  estudios que llegan a comparar la rentabilidad existente entre las mismas y otro tipo de inversiones, propias del mercado de valores. 

Entre  las  principales  ventajas  de  invertir  en  obres  de  arte360,  se  señala  que  estas  logran  mejores rendimientos en el largo plazo, tienen una reducida volatilidad ante situaciones mundiales de tensión o incertidumbre, requieren montos mínimos de inversión inferiores a los requeridos en el mercado de valores y nunca pierden totalmente su valor (en condiciones adecuadas de mantenimiento). 

A  pesar  de  los  beneficios  que  presentan,  estos  productos  no  cuentan  con  mercados  regulados  ni homologados, tienen una mayor volatilidad en el corto plazo comparado con activos de renta fija, no tienen mucha liquidez, los costos de traslado, seguro y mantenimiento son elevados, y los costos de transacción son superiores a los que se imponen en el mercado de valores. 

 

16.2.4 Competitividad  

Las IC son de gran importancia a los fines de generar desarrollo socio‐económico en una región. Ella es intensiva en mano de obra, conocimiento, creatividad, diseño y también permite generar productos exportables de alto valor agregado. 

Además de la influencia que las IC tienen sobre la economía, estas son competitivas en el sentido de que definen la cultura y la identidad de los habitantes de una ciudad, siendo también capaz de definir la percepción que el resto del mundo tiene sobre una ciudad en particular. 

Es un hecho que el sector bajo estudio se caracteriza por estar ligado a mercados de regiones desarrolladas; sin embargo para aquellas otras regiones que se encuentran en vías de desarrollo, este sector es capaz de brindar los componentes y contribuciones necesarias para incrementar el bienestar e impulsar su desarrollo. 

Se debe comprender que el potencial de la IC para transformar la sociedad es de suma importancia, respondiendo a desafíos sociales, demográficos y ambientales y abriendo paso a una economía más sustentable y estratégica. 

 

16.2.5 Cultura y desarrollo  

La IC debe ser promovida como fuente de libertad de expresión, innovación y creatividad, características intrínsecas a la labor artístico‐cultural y necesarias para lograr y mantener el desarrollo económico. 

El rol de la cultura es de relevancia tanto para la estructura de la sociedad como para el desenvolvimiento  individual  de  las  personas.  En  su  dimensión  económica,  las  manifestaciones,  productos  y servicios culturales que genera la creación artística y los recursos del patrimonio cultural, reflejan la diversidad cultural existente en un tiempo y espacio determinado. 

Es evidente que la cultura debe ser vista como el vehículo para el desarrollo económico de aquellos países que se encuentran en vías de desarrollo. Dan cuenta de ello la capacidad de las IC para generar trabajo e ingreso; la movilización de inversiones que promueve; el efecto multiplicador que produce sobre la actividad turística; la capacidad para evitar la emigración de personas capacitadas; y la capacidad para obtener éxito en proyectos financiados a partir de micro‐créditos, entre otras. 


360 Juan Ignacio Ruiz López, “La obra de arte: objeto simbólico y mercancía”, Imafronte Nº 18, 2006


 

Los productos culturales permiten intercambiar, comunicar y dar cuenta de diferentes maneras de expresión cultural, e inclusive pueden ser valorados económicamente y comercializados. Así, se abren las puertas a distintos actores que realizan las funciones de creación, producción, reproducción, difusión, comercialización, técnica, formación y conservación, entre otros. La agregación de esos productos y servicios representa el aporte económico de los sectores de la cultura al desarrollo. 

Cabe destacar que ningún factor determina por sí solo el desarrollo. Son numerosos los ámbitos de desarrollo que dependen de variables relativas a la cultura. Subestimar el papel que estas desempeñan en los procesos de desarrollo de las sociedades podría inclusive conducir al fracaso de los programas. 

 

Recuadro 16.4: A+ Schools 

El programa A+ Shcools es un movimiento de reforma educativa iniciado por el Kenan Institute for the Arts en 1995, con 25 escuelas que representan la diversidad existente en todo el estado de Carolina del Norte, Estados Unidos. 

El principal objetivo es crear escuelas que trabajen para todos – estudiantes, docentes, no docentes, familiares y la comunidad en general – a partir de la idea de que el arte puede contribuir a una reforma educativa que mejore las oportunidades de aprendizaje para todos los estudiantes. 

El programa A+ Schools hace foco en la importancia del arte para la enseñanza y el aprendizaje de todas las materias curriculares, basándose en ocho “A+ EssntialsTM”, que postulan la necesidad de instruir integrando: 

 

   La teoría de las múltiples inteligencias de Howard Gardner.

   Otras teorías de la inteligencia.

   Los últimos descubrimientos en investigaciones sobre el cerebro.

   La danza.

   El teatro.

   La música.

   Las artes visuales.

   La escritura creativa.

La filosofía A+ fomenta el ejercicio de la creatividad para que los objetivos generales se adapten a las circunstancias  y  prioridades  de  cada  estudiante  individualmente.  Para  esto,  las  escuelas  desarrollan enfoques tendientes a mejorar el estado de las artes, infundiendo el ambiente propicio para aprender. Luego de realizar una prueba piloto de cuatro años, se detectaron grandes mejoras tanto sobre los estudiantes, como profesores, escuelas, y hasta comunidades en general. Entre las más destacadas que se observaron sobre los alumnos: se incrementó la equidad; aumentó el compromiso; se mejoró  la  actitud,  asistencia  y  comportamiento;  y  progresaron  notablemente  en  los  resultados tanto en aspectos artísticos como en otros aspectos académicos. 

Actualmente, la eficiencia del programa A+ Schools ha  sido reconocida a nivel nacional en Estados Unidos. La prioridad del programa está en continuar apoyando y expandiendo la red, que ya cuenta  con  42  instituciones  en  el  Estado  de  Carolina  del  Norte  y  70  en  Oklahoma.  Asimismo  el ExPresidente  Bill  Clinton,  oriundo  de  Arkansas,  está  promoviendo  la  reforma  para  que  sea  implementada en todas las escuelas de dicho Estado. 

Fuente: IIE sobre la base de “The A+ Schools Program:  Sustainable, Arts‐based School Re‐form”, University of North Carolina at Greensboro. 

16.3 Contexto de la Industrias Culturales   

16.3.1 Estudio comparativo de casos  

En el presente título se analizan las metodologías utilizadas por cuatro de los países europeos que mayor desarrollo cultural poseen: Reino Unido, España, Alemania y Francia. El aprovechamiento de las IC es de gran importancia para cualquier país, sin importar el contexto económico en que se enmarcan, produciendo amplias repercusiones en el resto de la economía. Por otra parte, se observa que los planes de gobierno responden a una situación particular y por lo tanto no siguen una misma línea o estructura, permitiendo repensar nuevos modelos de desarrollo acordes a cada caso. 

En este marco, se ha detectado un nuevo vocabulario compartido que surge en este contexto encerrando términos como IC e Industrias Creativas361 y que da lugar al análisis socio‐económico de las actividades creativas y culturales desde distintos puntos de vista. Sin embargo, su surgimiento no es el fenómeno más importante de irrupción, sino que los conceptos estén en estrecha relación con otros,  tales  como  economía,  productividad  y  desarrollo,  rompiendo  una  vieja  concepción  que  los separaba por completo. 

El Cuadro 16.1 permite identificar cuáles fueron las áreas bajo estudio para cada uno de los países de Europa que participaron en una investigación realizada por el British Council362. 

El cuadro sirve para ilustrar que las áreas comprendidas dentro del sector cultural pueden ser muy distintas entre los países, respondiendo claramente a un criterio de base política que se utiliza para delimitar el sector. 

Este nuevo fenómeno iniciado en la década de 1990 cobra cada vez más protagonismo en la escena económica; en la búsqueda de una nueva industria tan productiva como las tradicionales, generando 


361 Definidas en el título 16.2, Marco Teórico. 

362 Bop Consulting, “Guía práctica para mapear las industrias culturales”, Edición del British Council y el Observatorio Iberoamericano del Derecho de Autor, Gran Bretania, 2010. 


una  cadena  imprescindible  de  actores  y  repercutiendo  de  manera  asombrosa  en  la  economía  de cada país. A su vez, sirve de base para el análisis particular de ciudades y países. 

 

16.3.2 Experiencias en el Mundo  

Los cambios paradigmáticos afrontados por el arte en las últimas décadas llevan a comprender la magnitud  del  impacto  que  éste  produce,  no  sólo  en  términos  sociales  sino  también  económicos. Bajo esta concepción comienzan a realizarse en distintas partes del mundo estudios acerca de las Industrias Culturales, evaluando no sólo su potencial de desarrollo y aporte a la sociedad en términos sociales, sino también económicos. 

Según una recopilación realizada en Santiago de Cali363, las primeras investigaciones en materia de IC han sido realizadas en los Estados Unidos y datan de la década de 1990. Dicho análisis fue realizado por Economists Incorporated y la Alianza Internacional para la Propiedad Internacional,  basandose en la contribución que las industrias de derecho de autor hacen al PBI estadounidense. Esta tendencia es continuada por la Unión Europea, quien en el 2003 lanza su publicación. 

En 1998 el Reino Unido realizó su primera publicación analizando las Industrias Creativas, continuado con un nuevo volumen para el año 2001. Esta tendencia seria repetida en diferentes partes del mundo como Hong Kong a través del Centre for Cultural Policy Research‐University of Hong Kong; 

España por medio de su Ministerio de Cultura; o Colombia, Perú, Chile y Venezuela, bajo el Convenio Andrés Bello. 

Argentina ya es parte de esta tendencia, por un lado la ciudad de Buenos Aires con la creación del Observatorio de Industrias Culturales y por otro lado Chubut con la creación del Observatorio Estadístico Cultural para el año 2008; a nivel nacional también cuenta con las investigaciones realizadas por el SinCA, quien calcula la Cuenta Satélite de Cultura. 

 

16.3.2.1 Experiencia en el Reino Unido 

En  torno  al  desarrollo  de  las  Industrias  Creativas,  a  fines  de  1990,  el  Reino  Unido  crea  el  British Council,  organización  internacional  encargada  tanto  de  las  relaciones  culturales  como  educativas. Dentro de sus objetivos se encuentran la coordinación de políticas culturales, expansión de relaciones internacionales y desarrollo del campo educacional, económico y social. Por otra parte, como complemento a dicha organización, se incluyó en la agenda de gobierno políticas con el fin de crear el marco adecuado para el desarrollo de la economía creativa. Así mismo se observan programas destinados a una constante capacitación, como también una actualización periódica de datos y mapeo. El objetivo mayor es lograr la integración de la cultura desde una lógica empresarial al ámbito económico. 

“El programa también integra a miembros de varios sectores fuera de la esfera de las artes (como ciencia, educación, deportes, etc.) para fomentar colaboraciones mancomunadas y multidisciplinarias”364.  De  esta  forma  la  sinergia  entre  referentes  culturales  y  actores  de  otras  áreas,  logran un trabajo en red, menester para el desarrollo cultural.   

 

16.3.2.2 Experiencia en Chile                                                         

363 Julio César Alonso, Ana Isabel Gallego, Ana María Ríos, “Industrias Culturales de Santiago de Cali: caracterización y cuentas económicas”, Editorial Cali, Colombia, 2010. 364 Bop Consulting, “Guía práctica para mapear las industrias culturales”, Edición del British Council y Observatorio Iberoamericano de Derecho de Autor, Gran Bretania, 2010.

La  experiencia  llevada  a  cabo  durante  el  año  2003  en  Chile  se  realizó  en  el  marco  del  Convenio Andrés Bello. El objetivo principal fue dilucidar el aporte de la cultura al PBI chileno. Para ello fue necesario establecer cuál era la situación real del sector, la visión social compartida y la matriz ideológica que ordena el pensamiento y accionar, frente a los aspectos públicos y así realizar políticas acordes al mismo.  

Como base del análisis, se utilizaron datos ya recolectados con anterioridad por el Banco Central de Chile y el Instituto Nacional de Estadísticas. De manera conjunta se realizó una exhaustiva recolección de datos, permitiendo una exitosa comparación a partir de la creación de indicadores comparativos en términos cuantitativos y cualitativos. 

Finalmente el estudio pudo demostrar la importancia de la cultura en el PBI chileno, creando de esta manera un foco atractivo de inversión y desarrollo tanto en términos sociales como económicos. 

 

16.3.2.3 Experiencia en Brasil 

Para  el  año  2004  durante  el  encuentro  de  la  UNCTAD  (Conferencia  de  las  Naciones  Unidas  sobre Comercio y Desarrollo) se propone la creación del Centro Internacional de las Industrias Creativas, siendo ratificada durante el Foro Internacional de Industrias Creativas llevado al año siguiente por la iniciativa del embajador Rubens Ricupero y del Ministro Gil. 

Tras no concretarse la creación de dicho centro, en el año 2006 se realizó en Rio de Janeiro el Foro Cultural  Mundial.  Todas  estas  iniciativas  serian el  germen  para  comenzar  un  trabajo  en  conjunto entre  diversas  instituciones,  públicas  y  privadas,  en  pos  del  desarrollo  cultural  a  lo largo del  país vecino. 

El proyecto brasileño partió con vistas a un objetivo claro, aprovechar un terreno fértil no explotado, como  lo  era  el  creativo,  en  pos  de  lograr  no  sólo  un  efectivo  desarrollo  económico  sino  la  consiguiente inclusión social de sectores antes marginados. Para ello se basó en tres programas, el primero relativo a la implementación de nuevas tecnologías y medios de comunicación, el siguiente en la valorización  económica  de  la  intangibilidad  cultural  desarrollando  un  modelo  de  integración  del patrimonio y el valor cultural, en la producción de bienes y servicios; y por último en crear ciudades creativas buscando por medio del impulso creativo el desarrollo económico de la urbe. 

La importancia del modelo brasileño está dada ya que no se sustenta en el aspecto creativo, sino también  implica  el  desarrollo  de  una  amplia  cadena  de  actores  públicos,  privados,  instituciones  y legislación. 

 

16.3.3 Experiencias en el País  

16.3.3.1 Experiencia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires 

La Ciudad de Buenos Aires es reconocida mundialmente por su excelencia en producción cultural. La creatividad y el talento porteño son foco de atracción y claramente un recurso imprescindible no sólo en términos sociales sino también económicos. Es así que se crea el Observatorio de Industrias Creativas (OIC), unidad de estudio dedicada a la obtención, elaboración y difusión de información cuantitativa y cualitativa sobre las industrias creativas de esa Ciudad.  Su objetivo principal es la sistematización de datos para la conformación de un sistema de información sectorial. La misma se utiliza para la toma de decisiones tanto públicas como privadas, como así también para la optimización de gestiones culturales.  

El  OIC  cuenta  entre  sus  actividades  más  destacadas  con  la  publicación  del  Anuario  de  Industrias Creativas de manera consecutiva desde el 2004 hasta 2009 marcando un hito sin precedentes en nuestro país. Los mismos realizan una detallada descripción de la actividad cultural y su repercusión e impacto en el producto bruto interno local. Además permiten la identificación del potencial industrial y la definición de políticas tendientes al desarrollo de la actividad cultural para la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. 

Para su promoción y difusión el OIC cuenta con su página web oficial, un boletín mensual, y espacios virtuales de debate e intercambio. Como complemento organiza y asiste a seminarios, cursos, foros y todo tipo de actividad relacionada a la materia, proporcionando un intercambio y diálogo activo con instituciones y actores afines. 

 

16.3.3.2 Experiencia en Chubut 

A partir del año 2008 y ante la importancia creciente de la actividad de tipo cultural en la provincia de Chubut, se creó el Observatorio Estadístico Cultural. Su objetivo principal es solucionar la carencia de información que afronta el sector, con lo cual creó intensos programas de investigación y relevamiento de datos. Su aporte principal es suplir la demanda tanto pública como privada de la creación y constante actualización de bases de datos representativas de todos los sectores culturales de la  provincia.  La creación de dichas bases de datos fue un paso fundamental para el desarrollo de investigaciones, y programas de políticas públicas impulsoras de las industrias culturales. 

Si bien dicha experiencia se encuentra en proceso de maduración, es altamente valorable la iniciativa propuesta por el gobierno sureño. 

 

16.3.4 Experiencias en la Provincia de Córdoba  

En el año 2006, la ciudad de Córdoba fue designada Capital Americana de la Cultura por su vasta trayectoria de más de 400 años, que configuran sentimientos encontrados entre lo clásico y lo vanguardista, lo conservador y lo revolucionario. 

Actualmente,  la  actividad  cultural  en  la  provincia,  se  encuentra  coordinada  por  una  Secretaria  de Cultura, llevando a cabo tareas de fomento y promoción. Los últimos tiempos para la provincia y sobre todo para la ciudad capital fueron altamente productivos. Viven un gran crecimiento en actividad de tipo cultural. La organización de festivales como el Festival Internacional de Teatro del Mercosur, Cosquín Rock, Cortopolis, Festival Nacional de Cortometrajes, Feria del Libro de Córdoba, Festival Nacional de Folclore de Cosquín y el Festival de Doma y Folclore de Jesús María entre otros, son un importante reflejo del crecimiento en materia cultural.  En el último año, tras la asunción del gobernador Juan Manuel de la Sota se sancionó una importante norma. El Decreto N° 0473‐046023/2011 garantiza la exención impositiva a las actividades culturales de la provincia y aquellas que tengan participación de ciudadanos cordobeses. Si se debe reconocer la importancia del avance, aún es necesario una mayor coordinación y promoción de los eventos y producciones manteniendo el prestigio que históricamente caracterizó a la ciudad en términos culturales y educativos, llevándola hasta el más alto nivel. 

  

16.4 Antecedentes legislativos 

16.4.1 Recomendación de la UNESCO  

Los gobiernos en general, a lo largo y ancho del mundo, no tienen instaurado un sistema normativo que garantice la realización de inversiones adecuadas y suficientes en el sector de la cultura.  Sin embargo, existe un instrumento que ha sido manifestado por la UNESCO en la “Declaración de São Paulo sobre la Cultura en el Desarrollo y la Integración de América”; en ésta, se realiza una recomendación para todos los gobiernos instándolos a que destinen por lo menos el uno por ciento del PIB a las inversiones del Sector Cultural. El Recuadro 16.1 transcribe parcialmente tal declaración. 

Recuadro 16.1: Extracto de la Declaración de UNESCO, São Paulo 2004  

Declaración de São Paulo Sobre la Cultura en el Desarrollo y la Integración de América Latina El Parlamento Latinoamericano reunido en su primera conferencia interparlamentaria de cultura, en São Paulo, Brasil, durante los días 21 y 22 de octubre de 2004: (…) 

6. Reconoce que la cultura es el marco de todas las actividades humanas, a la vez causa y consecuencia de las mismas, pero que para efectos de la planificación del desarrollo y de la integración, además de su carácter transversal también debe ser considerada como un sector. En este sentido, recomienda que los gobiernos destinen cuando menos el 1% del PIB a las inversiones en dicho sector, con la perspectiva de aumentar progresivamente las asignaciones; (…)  

Para el caso particular de Argentina, esta recomendación no ha sido reglamentada internamente y regulada por el Poder Legislativo de la Nación Argentina; siendo de carácter no vinculante. 

16.4.2 Ley de Mecenazgo  

Los cambios producidos en la economía mundial en los últimos años dan cuenta de la necesidad de encontrar una nueva fuente de desarrollo. De este modo aparece la cultura y el arte como materia en bruto para su explotación. En vistas a este panorama es menester la colaboración entre el sector público y privado para la explotación de dicha fuente. 

Según lo expuesto por Guzmán Cárdenas, “la actividad cultural es parte del proceso de formación esencial de los ciudadanos de una sociedad”365.   Si se considera junto a este pensamiento la creciente importancia que está tomando la cultura y el arte no es ilógica la participación conjunta del sector público y privado en el fomento de esta actividad.   

En este contexto una de las alternativas viables es la Ley de Mecenazgo, entendiendo por tal “como aquellas actuaciones culturales promovidas por sociedades económicas con el fin de promocionar su imagen de marca. El sector privado empresarial devuelve a la comunidad un beneficio que ha obtenido de ella. No se obtiene, por tanto, una contraprestación económica directa, sino un beneficio de difícil cuantificación en imagen, publicidad, relaciones institucionales, reconocimiento y solidaridad social, etc”366. La participación del  sector privado en la promoción y financiamiento de producciones artísticas, acarrea intereses de fondo, que van desde el mero desarrollo cultural hasta una contraprestación en cuanto a la imagen empresarial y en algunos casos reducciones impositivas.  


365 Carlos E. Guzmán Cárdenas, “El Mecenazgo y la Cultura”, Revista Comunicación, Venezuela, 2001. 

366 Ibíd


  

A lo largo del mundo existen exitosas experiencias avalando la viabilidad de la Ley de mecenazgo, tal como lo es el caso brasilero con la Ley Rouanet ya que “llevó el monto de los aportes en cultura de 14 millones a 270 millones de reales entre el 94 y el 98. (…) Cada millón invertido creó 160 empleos”367.  Se puede apreciar cómo su buena implementación acarrea éxitos económicos además del desarrollo cultural por las actividades en sí.  

Actualmente en Argentina a nivel nacional se carece de una legislación en pos del mecenazgo. No obstante en la ciudad de Buenos Aires fue sancionada en el año 2006, logrando importantes alicientes para artistas e instituciones y grandes avances en lo que a producción cultural respecta.  

En cuanto a la provincia de Córdoba, no se cuenta con una ley de Mecenazgo aunque en el sector de las  Artes Audiovisuales luchan por una Ley de Cine que respalde la industria a nivel provincial. Por otra parte tras la asunción del Gobernador de la Provincia de Córdoba, Juan Manuel de la Sota368, se firmó el Decreto  N°  0473‐046023/2011,  garantizando  la  exención  impositiva  a  las  actividades  culturales.  Aunque  el camino parece allanarse en beneficio del desarrollo cultural, aún quedan importantes medidas por tomar. 

16.4.3 Ley de Medios  

A nivel nacional la Ley de Medios constituye un avance fundamental para el desarrollo audiovisual. Como se destaca en el Recuadro 16.2, el objeto principal de la misma es la promoción, desconcentración y fomento de la competencia, buscando lograr un mayor alcance como así también un mercado legítimo en términos de competitividad.  

Recuadro 16.2: Extracto del Artículo 1º de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual Nº 26.522 

ARTÍCULO 1º — Alcance. El objeto de la presente ley es la regulación de los servicios de comunicación audiovisual en todo el ámbito territorial de la República Argentina y el desarrollo de mecanismos  destinados  a  la  promoción,  desconcentración  y  fomento  de  la  competencia  con fines de abaratamiento, democratización y universalización del aprovechamiento de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación. Quedan comprendidas en las disposiciones de esta ley todas las emisiones que tengan su origen en el territorio nacional, así como las generadas en el exterior cuando sean retransmitidas o distribuidas en él. (…)

Fuente: IIE sobre la base del Boletín Oficial de la República Argentina. 

En el actual contexto tecnológico y el constante avance en esta materia es menester acercar a la sociedad los medios básicos para poder expresarse libremente. Este derecho inalienable de las personas (resaltado en el artículo segundo de la ley), constituye el germen principal de motivación de la sanción de la Ley 26.522, que se transcribe en el Recuadro 16.3.       

Recuadro 16.3: Extracto del Artículo 2º de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual Nº 26.522 

ARTÍCULO 2º — Carácter y alcances de la definición. La actividad realizada por los servicios de comunicación audiovisual se considera una actividad de interés público, de carácter fundamental para el desarrollo sociocultural de la población por el que se exterioriza el derecho humano inalienable de expresar, recibir, difundir e investigar informaciones, ideas y opiniones. La explotación  de  los  servicios  de  comunicación  audiovisual  podrá  ser  efectuada  por  prestadores  de gestión estatal, de gestión privada con fines de lucro y de gestión privada sin fines de lucro, los que deberán tener capacidad de operar y tener acceso equitativo a todas las plataformas de transmisión disponibles. (…)  

Fuente: Boletín Oficial de la República Argentina


367 Ibídem. 

368 Asume su segundo mandato en diciembre de 2011


Para el cumplimiento y aplicación de la misma se conformaron varios órganos, entre ellos se creó un organismo de carácter autárquico, la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, quien se encarga de velar por la correcta interpretación y cumplimiento de los artículos. También posee actividades referidas a la reglamentación necesaria y la representación del país en ámbitos internacionales referidos a la materia audiovisual.   

En síntesis, si bien la sanción de la Ley 26.522 provocó sentimientos encontrados principalmente en torno al cambio en la propiedad de los medios de comunicación, tendiente a eliminar cualquier posibilidad de monopolio, y la descentralización de las producciones, no puede negarse el avance logrado en términos de realización audiovisual, alentando mediante premios y subsidios a producciones  de todo el país y logrando de este modo incentivar a regiones que poseen un potencial oculto. 

Uno de los casos fue la Ciudad de Córdoba con la película “De Caravana”, de Rosendo Ruiz, que logró un significativo impacto a nivel nacional. 

 

16.5 Cultura y economía 

16.5.1 Cuenta satélite de cultura  

La  Cuenta  Satélite  de  Cultura  (CSC)  es  un  sistema  de  información  para  analizar  las  dimensiones económicas de la cultura, incluyendo: costos de provisión de productos culturales, gasto nacional en productos  culturales, mecanismos de financiación del consumo de productos culturales y generación de empleo y valor agregado por las industrias culturales369. 

El objetivo de este sistema es realizar aportes de información que colaboren en la toma de decisiones y el diseño y evaluación de políticas tanto del sector público como del privado, en materia cultural. La construcción del mismo se realiza en base a conceptos, definiciones,  clasificaciones y reglas contables, en el marco del sistema de cuentas nacionales. 

Es por ello que la CSC, como herramienta de contabilidad cultural, debe contar con la acción coordinada y permanente de los responsables a nivel institucional de la cultura y de aquellos que elaboran y actualizan las cuentas nacionales. 

Para el caso de Argentina, la Secretaría de Cultura de la Nación y la Dirección Nacional de Cuentas Nacionales del INDEC son los encargados de medir económicamente a la cultura, desde el año 2006. Siendo recién a principios de 2008 la formalización del Convenio entre la Secretaría de Cultura de la Nación y el INDEC que actualmente rige a los fines de garantizar la medición de la CSC. Cabe destacar que la medición de la CSC es un proyecto que surge a partir del Convenio Andrés Bello, institución reconocida internacionalmente e integrada por Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador,  España,  México,  Panamá,  Paraguay,  Perú,  República  Dominicana  y  Venezuela. Estos  países,  a través de la organización que los congrega, tomaron la decisión de comenzar a registrar mediciones relativas al gasto cultural, en el marco de las recomendaciones de UNESCO y a partir de un Manual Metodológico que desarrollaron. 

Esta metodología cuenta además con la aprobación del Estado Argentino, a partir de lo cual se internaliza la metodología, garantizando una correcta utilización de la contabilidad, eliminando problemas técnicos y conceptuales y logrando una mejor comparabilidad entre distintos países. 


369  Agencia  Española  De  Cooperación  Internacional  Para  El  Desarrollo,  “Cuentas  satélites  de  cultura:  Manual metodológico 

para su implementación en Latinoamérica”, Edición del Convenio Andrés Bello, Colombia, 2009.


 

Sintetizando, la CSC constituye un instrumental de gran importancia, teniendo entre sus principales objetivos la determinación de: 

     Las actividades y productos que constituyen el campo cultural.

     Los procesos por los que se producen e intercambian los productos culturales.

     Los flujos de comercio exterior de productos culturales.

     El gasto total en productos culturales por tipo de gasto (consumo de los hogares, formación de capital, utilización intermedia, compras o gastos de las administraciones públicas o de las organizaciones sin fines de lucro). 

     Las fuentes de financiación, beneficiarios y usuarios del consumo cultural: subsidios, transferencias corrientes o de capital. 

     Información no monetaria  sobre la oferta y demanda de los productos culturales: número de  establecimientos  culturales,  indicadores  no  monetarios  sobre  libros,  diarios  y  revistas, artes escénicas y música, espectáculos de variedades, discos y DVDs, cine, televisión,  monumentos, bibliotecas. 

 

16.5.1 La cultura en el PIB  

No existen investigaciones que determinen la incidencia de la cultura en el PIB de la Provincia de Córdoba y mucho menos para la Ciudad de Córdoba, ya que tampoco se determina su PIB. A pesar de ello se puede analizar información análoga para la Argentina. 

El  Sistema  de Información  Cultural de  la Argentina  – SinCA  –  dependiente de  la  Presidencia  de  la Nación, desarrolla desde octubre de 2007 un proyecto denominado “Cuenta Satélite de Cultura”. El mismo surge a partir de la celebración de un convenio bilateral entre la Secretaría de Cultura de la Nación y el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos – INDEC –, con el objetivo de elaborar información relativa al PBI cultural nacional, determinando cuál es el peso que esta actividad tiene sobre el nivel de actividad agregada. 

En función de los datos publicados por el SInCA a septiembre de 2011, y como se destaca en el Gráfico 16.1, el PBI cultural ha tenido un desempeño positivo desde el período 2004 hasta el 2010 en términos  absolutos;  mientras  que  en  términos  del  PBI,  sólo  ha  menguado  en  el  período  2010.  A pesar  de  ello,  todos  los  valores  relevados  han  superado  ampliamente  las  recomendaciones  que hiciera la UNESCO. 

     

Es importante mencionar que la metodología abordada para determinar la cuenta satélite de cultura cumple con la propuesta del Convenio Andrés Bello, el cual ha sido suscripto por los países miembros del Mercosur, a los fines de tener una estadística comparable regionalmente.  

Finalizando, también se debe considerar que en Argentina existe un alto nivel de informalidad en general. En el mismo sentido se observa la inexistencia de una categorización adecuada para una gran diversidad de actividades culturales, enmarcadas bajo otra tipificación tributaria o que se encuentran agrupadas con actividades del tipo deportivo, a modo de ejemplo. 

 

16.5.2 El gasto público en cultura  

Además de la cuenta satélite de cultura, se puede obtener un indicador sobre las actuaciones del sector público en aspectos culturales a partir de la participación de las erogaciones presupuestarias para este sector, en relación al total de los gastos. A través de este, los organismos estatales de los diferentes niveles definen anual e incluso plurianualmente las políticas y lineamientos culturales.  Para analizar las asignaciones presupuestarias, se puede considerar y comparar a los tres niveles de gobierno que tienen injerencia sobre la Ciudad de Córdoba; ellos son, el gobierno de la Ciudad de Córdoba, el gobierno de la Provincia de Córdoba y el gobierno Nacional; siempre tomando el período 2010 de referencia. 

En el Cuadro 16.2 se observa que las erogaciones presupuestadas con destino a Cultura son realmente escasas. En cuanto a Córdoba, tanto para el Gobierno Municipal, como para el Provincial, han representado un monto apenas superior al 1% del gasto. Sin embargo, salvo para la Municipalidad de Rosario,  los  gobiernos  de  los  diferentes  niveles  han  presupuestado  una  participación  inclusive menor para el área de cultura. Cabe destacar que en materia internacional, el presupuesto nacional destina una participación sustancialmente menor a cultura que en Chile (que la duplica) o Colombia (que es más de diez veces superior).  

  

Adicionalmente, se debe mencionar que a pesar de que la Municipalidad de Córdoba y el Gobierno de  la  Provincia  de  Córdoba  destinan  una  participación  presupuestaria  superior  a  otras  ciudades  y provincias, la mayor parte de estos presupuestos están afectados al personal estatal dependiente de las  secretarías  de  cultura,  representando  un  90,35%  y  un  64,13%  respectivamente  para  los  casos mencionados. Comparativamente con otros países, aunque el Gobierno Argentino destina sólo un 38,39% de su presupuesto cultural a personal, países como Chile y Colombia destinan porcentajes sumamente inferiores, del 10,98% y 9,02% respectivamente. 

Analizando  la  cantidad  de  recursos  humanos  asignados  al  área  de  cultura  en  los  gobiernos  de  la Ciudad y Provincia de Córdoba y en el Nacional, existe una gran disparidad. El Cuadro 16.3 muestra el comportamiento de la participación del personal de cultura respecto al total del personal, para distintas ciudades, provincias y países.

 

  

Comparativamente, mientras se asciende de nivel de gobierno, la participación del gasto salarial de cultura en el gasto total del área disminuye. Asimismo es importante destacar que en países como Chile, dicha participación es la mitad que en Argentina. 

Se debe mencionar que evaluando el gasto salarial promedio por agente en área de cultura, se destaca la Provincia de Córdoba entre otros gobiernos del mismo nivel y de otros niveles, con un valor de  $6.762  mensuales;  siendo  casi  un  40%  superior  a  lo  presupuestado  por  la  municipalidad  de Córdoba. 

Es importante resaltar que dada la inexistencia de marcos normativos regulatorios del gasto gubernamental en el sector de cultura, los montos observados son sumamente variables.  

 

16.6 Propuestas para el desarrollo de las Industrias Culturales en la Ciudad de Córdoba 

16.6.1 Observatorio de Industrias Culturales  

Las IC en la Ciudad de Córdoba presentan capacidades propias de industrias con importantes posibilidades de desarrollo, sin embargo las elevadas tasas de informalidad y la falta de información propia del sector dificultan el diseño de políticas públicas así como la generación de iniciativas a nivel privado. 

En  este  marco,  resulta  necesaria  la  creación  de  un  Observatorio  de  Industrias  Culturales  (OIC),  a través del cual se pueda obtener, elaborar y difundir información cuantitativa y cualitativa sobre la IC local,  a través  de  un  equipo  interdisciplinario.  Cabe  destacar  que por medio  de  estas  medidas  no sólo se fomenta el desarrollo de la Industria, sino también su internacionalización. El principal objetivo del OIC sería contribuir a la conformación de un sistema de información sobre las IC que sirva a la toma de decisiones, tanto por parte de la gestión pública, como por parte de los actores que intervienen en la producción cultural. 

 

Para ello, el OIC se encargará de: 

     Recopilar y procesar información estadística.

     Analizar la evolución de las IC y su incidencia en la economía, la cultura y el desarrollo local y nacional. 

     Investigar temas clave para la producción y circulación de bienes y servicios creativos.

     Difundir la información generada.

En relación a la incidencia de las IC en la economía, esta institución es óptima para la elaboración de la Cuenta Satélite de Cultura, tal como lo realiza el SinCA. Cabe destacar que este instrumento es clave para la determinación de desviaciones respecto a las recomendaciones dictadas por UNESCO, respecto a las inversiones en el sector de las IC. 

 

16.6.2 Formación de grupos exportadores  

La IC en la Ciudad de Córdoba constituye un ámbito en el que no abunda la información y la investigación a nivel económico, sin embargo cuenta con gran potencial para su desarrollo y para generar valor agregado a partir de la intensividad en el uso de mano de obra.  

La dificultad para pensar en el sector bajo un esquema de negocio, la insuficiente inversión y el bajo grado de asociatividad, constituyen las principales debilidades del sector. Estos factores negativos son  los  que  permiten  que, por  un  lado,  los  productos cordobeses  sean  relegados a  los  de Capital Federal; y por otro lado, no sean tenidos en cuenta a nivel internacional. No obstante, la IC en la Ciudad de Córdoba, constituye un sector de gran potencialidad y competitividad, siendo necesario incrementar el diálogo existente entre los actores y lograr un acercamiento con el sector público. 

Para ello, una de las vías posibles es la constitución de grupos exportadores sectoriales dentro del ámbito de las IC, con los cuales se fomentaría la actividad a través del involucramiento de la industria privada, las autoridades públicas y/o las instituciones académicas; siendo viable, en última instancia, la conformación de un clúster cultural. 

Es importante destacar las ventajas comparativas que esta industria posee para la exportación de los productos, con lo cual se podría focalizar la creación del grupo en las posibilidades de desarrollo a nivel internacional y en función de la alta tasa de generación de empleo. Entre las principales ventajas que posee esta industria, se puede mencionar: 

     Creatividad e innovación en la producción.

     Oferta de mano de obra calificada.

     Facilidad para la exportación de productos y servicios desde Argentina.

     Tipo de cambio real.

La  creación  de  grupos  exportadores  sectoriales  dentro  de  la  IC  contribuye  a  lograr  un  desarrollo económico y social de características sustentables fundamentalmente a través de un mejor aprovechamiento de las políticas comerciales que a nivel local, nacional e internacional se pueden aplicar, pero que actualmente son insostenibles por cada actor individualmente. 

Además, sería viable la creación de un área de investigación y desarrollo que brinde asesoramiento y capacitación a las empresas, y que las mismas puedan acceder a información sobre ferias, festivales, bienales, mercados de arte, etc.; además de que sirva como plataforma para la discusión y solución de problemas comunes. 

Los principales sectores sobre los cuales la IC presenta oportunidades para la generación de grupos exportadores son: 

     Editoriales

     Galerías de arte visual

     Productoras de audiovisuales

16.7 Turismo y Cultura en la Ciudad de Córdoba 

El turismo cultural, como su nombre lo indica, hace hincapié en aspectos culturales de un determinado sector turístico, ya sea una población o una metrópolis. Para su desarrollo necesita de recursos artísticos, culturales e históricos, constituyendo una actividad de baja estacionalidad. En este marco, la Ciudad de Córdoba es cuna de la cultura a nivel regional, nacional e internacional, por su riqueza arquitectónica de diferentes épocas (pre‐colonial, colonial, moderna y contemporánea), su variedad de museos e intervenciones artísticas que se realizan a lo largo del año. 

El ejido municipal es valorado turísticamente no sólo por su historia, sino por su presente repleto de actividades culturales y recreativas. El Centro Histórico y su patrimonio arquitectónico es motivo de visita. Además, la tradicional Universidad Nacional de Córdoba, atrae a científicos y técnicos. 

Desde 1981, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha incorporado a nueve sitios naturales y culturales de la Argentina en la lista del Patrimonio Mundial. Entre ellos, la Ciudad de Córdoba alberga a la Manzana Jesuítica.  

La misma comprende un bloque integrado por la Iglesia de la Compañía de Jesús, la Capilla Doméstica, la Residencia de los Jesuitas, el Colegio Nacional de Monserrat y el Rectorado de la Universidad Nacional de Córdoba. Cada uno de estos espacios ofrece actividades tales como visitas guiadas para conocer la historia de los edificios y la cultura y tradición de los antepasados que los habitaron. A estos espacios se los denomina museos de patrimonio histórico. 

Cabe aclarar que la Manzana Jesuítica de la Ciudad de Córdoba, monumento histórico nacional, fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en el año 2000. Además, así como la Manzana Jesuítica, existen otras obras maravillosas en la capital provincial, tal es el caso de la Iglesia de los Capuchinos, la Iglesia Catedral y la Cañada, que se destacan entre decenas de atractivos turísticos como los citados en el Mapa 16.1.  

16.8 Instituciones e Infraestructura Cultural 

Las  IC  se  caracterizan  por  ser  actividades  de  tipo  artístico  y  cultural  que  abarca  no sólo  una  gran cantidad de disciplinas sino también que involucran entre su personal artistas y colaboradores ajenos al rubro.  

La Ciudad de Córdoba posee una importante variedad institucional a nivel artístico en lo que respecta a los rubros de Artes Visuales, Artes Escénicas, Música, Editoriales y Artes Audiovisuales. Tanto de perfil  público  como  privado,  conformando  un  polo  artístico  de  gran  importancia.  Tras  relevar  las instituciones culturales de la ciudad, se observaron diferentes características. 

En primer lugar el barrio de mayor concentración es el Barrio Centro, con más de 30 instituciones entre oficiales e independientes. Uno de los atractivos más importantes es la “Manzana Jesuítica”, reconocida por la UNESCO desde el año 2000 como Patrimonio Mundial. Por otro lado también concentra importantes centros culturales, editoriales y hasta galerías de arte. 

El segundo barrio surgido del relevamiento es el barrio de Nueva Córdoba. Cuenta con importantes atractivos históricos unidos bajo el corredor de la “Media Legua de Oro”, entre los que se destacan el Museo Superior de Bella Artes Evita, ex Palacio Ferreyra; Ciudad de las Artes; Paseo del Buen Pastor; Teatro del Libertador San Martin . Por otra parte posee una gran actividad en cuanto a centros culturales y espacios de arte. 

El Barrio Güemes, es el tercer foco de concentración cultural de la ciudad. Dentro de las actividades más importantes cuenta con un Paseo de Arte, residencias de artistas,  bares culturales, comercios de diseño, entre otros. El atractivo de jóvenes es indudable convirtiéndolo en un sector de tipo recreativo y comercial.  

Con  respecto  al  resto  de  la  actividad  artístico‐cultural  se  observa  una  desconcentración  hacia  los barrios periféricos, con importantes Centros Culturales Municipales destinados a acercar la cultura. 

Entre los más activos se encuentran Cofico, General Bustos, General Paz, Bella Vista, Alta Córdoba, y Observatorio.  Además  incorporan  “espacios  autogestionados”  encargados  de  brindar  actividades alternativas a las que ofrecen los oficiales. 

En síntesis, la infraestructura cultural de la ciudad capitalina se encuentra concentrada en tres barrios al centro de la ciudad, creando un polo artístico de gran magnitud. No obstante es necesaria una política eficaz de acercamiento hacia las zonas periféricas con constantes actividades y equipamiento acorde a las circunstancias.  

 

16.9 Ferias y Festivales 

Tras el surgimiento en 1895 de la primera bienal de arte en Venecia, periódicamente a lo largo del mundo se desarrollan innumerables eventos relacionados al arte, adquiriendo variadas denominaciones bienal, trienal, feria o festival. Los mismos son verdaderos movilizadores  y vidrieras para todo tipo de manifestación cultural. Generan un profundo impacto en todos los ámbitos de la sociedad, ya sean económicos, sociales y  culturales. Las  ciudades  y  regiones  compiten  entre  sí  en  la  satisfacción  de  las  necesidades  de  los  diferentes grupos de usuarios ‐visitantes, residentes, inversiones o empresas‐ y la cultura refuerza, en ese sentido, la competitividad de la zona (Devesa Fernández, Herrero Prieto 2009)370. Estos eventos son un                                                         


370 M. Devesa Fernández y L. C. Herrero Prieto, “Análisis económico de la demanda de un festival cultural”, Estudios de Economía Aplicada, volumen 27‐1, 2009.  


polo productivo no sólo en términos económicos, por los flujos monetarios ligados al consumo y el turismo, sino también son foco de desarrollo en términos sociales.  

En Argentina actualmente se realizan exitosos eventos culturales, a modo de ejemplo podemos citar ArteBa realizada sistemáticamente desde hace veinte años en la ciudad de Buenos Aires convocando 120.000 espectadores en apenas cinco días de duración. Esta cifra demuestra el gran movimiento que se genera en torno al arte y la cultura. 

En cuanto a la Provincia de Córdoba, en la década de 1960 se posicionaba internacionalmente como centro cultural tras el desarrollo en tres oportunidades de las Bienales Iberoamericanas de Arte IKA, las cuales no se volverían a llevar a cabo. Para los `90 Córdoba volvía a ser centro del arte, pero esta vez a nivel nacional convocando a los más importantes galeristas del país. La falta de difusión, promoción y ventas llamó nuevamente al fracaso. Hacia el 2010 se realiza la única edición hasta el momento de la exhibición internacional Arte Afuera. 

Actualmente en la ciudad de Córdoba se desarrollan escasos eventos de  gran escala internacional como el Festival Internacional de Teatro del Mercosur, pero de a poco comienza a recuperar su perfil cultural que construyó durante más de 400 años.  

 

16.10 Formación y Educación 

La Provincia de Córdoba, sobre todo la ciudad capital, cuenta con una excelente trayectoria en formación  de  recursos  humanos.  Dentro  de  sus  instituciones  educativas  se  aprecian  tanto  públicas como privadas. 

El ámbito por excelencia es la Universidad Nacional de Córdoba, quien cuenta con la Escuela de Arte (futura Facultad de Arte) la cual se divide en departamentos de Cine y Tv, Música, Plástica y Teatro. 

En cuanto a las instituciones dependientes del Gobierno Provincial se encuentran: Escuela de Bellas Artes Figueroa Alcorta, Escuela de Artes Aplicadas Lino Spilimbergo y Escuela de Teatro Roberto Arlt. Por otro lado existen escuelas y universidades privadas que brindan cursos y carreras de grado contribuyendo al perfeccionamiento de los recursos de la provincia. 

16.11 Asociaciones, Organizaciones y Agrupamientos 

Actualmente en la Provincia de Córdoba existe una variada gama de organizaciones y asociaciones dedicadas a nuclear artistas y personas afines al medio en pos de la representación y defensa de sus intereses. Las mismas se dividen de acuerdo al rubro que pertenezcan ya sea Música, Artes Escénicas, Artes Audiovisuales o Editoriales. 

En primer lugar se encuentra como sector más organizado a las Artes Audiovisuales. Cuentan con una variedad importante de organizaciones que protegen los intereses de la totalidad del personal involucrado en la actividad. 

Como iniciativa local surgieron dos asociaciones importantes. Asociación de Productores Audiovisuales de Córdoba (APAC) y  Productores y Realizadores de Audiovisuales de Córdoba (PRAC); destinadas a promover y proteger los intereses de productores y realizadores cordobeses en cuanto a producción fílmica y televisiva. 

Otras de las agrupaciones encontradas son La Red de actores y la Asociación Argentina de Actores, delegación Córdoba,  encargadas de nuclear actores, directores y técnicos cordobeses.  En cuanto a los dramaturgos se agrupan en Argentores, dedicada  al control de los derechos de autor como así también a crear un nexo entre creadores y realizadores.  

A  nivel  nacional  se  puede  mencionar  el  Instituto  Nacional  de  Cine  y  Artes  Audiovisuales  (INCAA), Asociación de los técnicos (RAC) y Núcleo de Documentalistas de Argentina (ADN). Cada una en su área es el máximo exponente de los intereses de sus miembros. 

En cuanto al sector de la Música, el panorama también es bastante alentador, contando con cuatro importantes asociaciones en representación del mismo. Por un lado el Sindicato de Músicos de la Provincia de Córdoba vela por los derechos de los trabajadores de la música, en su mayoría los de carácter  estatal.  También  existe  una  asociación  civil  sin  fines  de  lucro,  conformada  por  músicos, productores, managers y gente  afín  al  rubro  llamada Músicos  Convocados  de  Córdoba  (MUCC). A nivel nacional existen el Sindicato Argentino de Músicos (SADEM) y la Federación Independiente de Músicos de la Argentina (FIMA). 

Para las Artes Escénicas, a nivel local, también existen agrupaciones; una de ellas es La Red de Salas, representada  por  Marcelo  Castillo,  que  aglutina  las  salas  de  teatro  independiente  y  vela  por  sus derechos  ante  las  distintas  normativas  existentes  que  generan  dificultades  para desempeñar  sus actividades. Además comparte junto al sector de las Artes Audiovisuales La Red de Actores y la Asociación Argentina de Actores delegación Córdoba. A nivel nacional se encuentra UNIMA, encargada de agrupar a los titiriteros.  

Por el lado de Editoriales existen dos organizaciones importantes, la Sociedad Argentina de Escritores de Córdoba (S.A.D.E Córdoba) y Libros Son. Esta última posee la particular característica de estar conformada por un grupo de más de cincuenta artistas y productores independientes de Córdoba dedicados a  autogestionar sus producciones culturales.  

En síntesis, se observan cuatro sectores encaminados a una eficaz organización, pero sin dudas aún faltan importantes avances en cuanto a la representación y defensa de sus intereses. No obstante en la Provincia de Córdoba, las Artes Visuales carecen de organización generando una falta de unificación de pretensiones y defensa de sus derechos. 

 

16.12 Situación actual de la cultura en Córdoba 

Históricamente  la  “Ciudad  de  las  Campanas”  se  destacó  como  centro  de  producción  intelectual  y cultural a nivel provincial, nacional e internacional, estatus que no ha perdido hasta la actualidad. Tal es así que en el año 2006 fue designada como Capital Cultural de América por la Organización Capital Americana de la Cultura. 

El talento e intelecto que caracterizaron por más de 400 años a la ciudad aún hoy muestra su vigencia a nivel mundial, y su calidad en términos educativos y culturales no dejan de asombrar al mundo. La actividad artístico‐cultural de la ciudad atravesó períodos cíclicos. Recientemente tuvo su mayor decadencia a comienzos del siglo XXI debido al fuerte impacto de la crisis económica argentina, pero se recuperaría, comenzando nuevamente a demostrar todo su esplendor.  En los últimos años se llevaron a cabo importantes políticas culturales, como la decisión de expropiar el tradicional Palacio Ferreyra y convertirlo en el “Museo Superior de Bellas Artes Evita”, ex “Palacio Ferreyra” o  la ampliación del “Museo Emilio Caraffa”.  Sin embargo, la principal política llevada a cabo sería la construcción de la “Media Legua de Oro” inspirada  en  aires  europeos,  conformando  el  principal  corredor  cultural  de  la  ciudad.  El  recorrido ofrece la historia a la vista de la ciudad y su principal foco artístico a través de edificios y centros educativos.  

Actualmente, como se mencionó con anterioridad, con el decreto N° 0473‐046023/2011, el Gobernador Juan Manuel de la Sota, garantizó la exención impositiva a las actividades culturales. En materia de política cultural se observan importantes avances, lo cual parece allanar un camino incierto durante años pero que promete un futuro alentador. 

La actividad de la ciudad es de lo más variada, posee importantes centros culturales internacionales tales  como  el  Centro  Cultural  España‐Córdoba,  Goethe  Institut,  el  Instituto  Italiano  de  Cultura  de Córdoba y la Alianza Francesa, entre otros, proporcionando diferentes opciones culturales. Por otra parte la oferta en torno a los centros culturales no se agota, existiendo de carácter municipal, provincial y autogestionados, dedicados a difundir y acercar la cultura a espacios antes inalcanzables.   

En cuanto al movimiento teatral, presenta una calidad extraordinaria, ofreciendo obras diariamente en el caso de los teatros oficiales y con importante frecuencia en cuanto a la actividad independiente. La realización desde ya hace ocho años del “Festival Internacional de Teatro del Mercosur” posiciona a la ciudad en la elite teatral latinoamericana. 

La producción audiovisual, durante el período 2010‐2011, se encontró fuertemente activada por la realización de series, cortometrajes y películas locales de alta calidad. Entre ellas podemos mencionar  El Edén, de Oruga Films; La Purga, de Garabato Animaciones y Prisma Cine; El invierno de los raros, de Rodrigo Guerrero; De Caravana, de Rosendo Ruiz; y La Población, de Mario Gómez. Dichas producciones fueron estrenadas con alta repercusión en el público local y nacional. 

Musicalmente la ciudad siempre se destacó por el género característico de los cordobeses, el cuarteto, generando grandes producciones a lo largo de la provincia y el país. No obstante ya es una tradición  en  la  provincia  los  festivales  dedicados  al  rock,  folclore  y  en  los  últimos  tiempos  la música electrónica. 

Por su parte, el sector de las Artes Visuales adquiere poco a poco mayor difusión. Tradicionalmente Córdoba aportó artistas consagrados como Malanca, Genaro Pérez, Emilio Caraffa, Antonio Pedone y José Vidal y lo sigue haciendo en la actualidad. Con un patrimonio de más de 900 obras, los cordobeses disfrutan de los museos locales durante todo el año, pero la cita obligada es bimestralmente en la noche de los museos convocando más de 100.000 espectadores.  Por otra parte la actividad toma importancia con Galerías de Arte locales que participan de ferias en el exterior, colaborando por su parte con la internacionalización de la cultura. 

En síntesis, la actividad cultural muestra un enorme potencial no sólo en las producciones sino también en torno a las repercusiones que genera en cada una de sus exhibiciones. El público se muestra cada vez más interesado en la oferta artística local, creando un clima ideal para el desarrollo cultural. 

 

16.13 Consideraciones finales 

La  relevancia  que  poco  a  poco  va  adquiriendo  la  IC  presenta  una  oportunidad  para  que  el  IIE  las investigue, brindando una visión socio‐económica en complemento de lo técnico‐artístico .  Es por ello que a partir de la presente edición de “El Balance de la Economía Argentina” se ha incursionado sobre ellas. 

A lo largo del capítulo se han introducido modernos conceptos que ayudan al lector a posicionarse en esta particular actividad. Entre ellos se destacan: industria cultural, industria creativa, producto cultural y economía de la cultura. 

A partir del análisis de las IC, sobre experiencias exitosas en otros países y en otras provincias argentinas, se han sentado las bases para analizar con mayor profundidad los efectos que esta industria genera sobre la economía. Es así que se han analizado la cuenta satélite de cultura de Argentina, el impacto de la cultura en el PIB y el gasto público destinado al sector. Además, en base a los datos presentados y al contexto actual observado para la Ciudad de Córdoba particularmente, se han realizado diferentes propuestas concretas para fomentar un mayor desarrollo económico‐cultural. En base a relevamientos y estudios de campo, se ha descripto el efecto de la cultura sobre el turismo en  la  Ciudad  de  Córdoba;  las  instituciones  e  infraestructuras  existentes;  las  ferias  y  festivales;  las instituciones relativas a la formación y educación artístico‐cultural; y las asociaciones, organizaciones y agrupamientos representantes de los distintos actores involucrados en la cadena de valor. Por  último,  a  partir  de  la  investigación  aquí  presentada,  se  sientan  las  principales  características relativas a la situación actual de la cultura en la Ciudad de Córdoba. 

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